Viviana Garrido Fuentes, suboficial de Carabineros y encargada de la Oficina de Violencia intraFamiliar, destacó la relevancia de la prevención en la lucha contra la violencia intrafamiliar. Con casi seis años al mando de esta oficina, que forma parte de las ocho distribuidas a nivel regional, su trabajo va más allá de atender denuncias por violencia ya ocurrida. Su enfoque principal está en evitar que estos delitos sucedan.
“La violencia intrafamiliar no solo debe ser atendida cuando ya se ha cometido un delito, sino que, como sociedad, debemos actuar para evitar que lleguemos a ese punto. Nuestra tarea principal es prevenir, y para ello llevamos a cabo diversas actividades en colegios, juntas de vecinos, y empresas que lo soliciten. La idea es educar y concienciar antes de que el daño suceda”, comentó Garrido Fuentes.
El trabajo preventivo se lleva a cabo a través de capacitaciones, charlas educativas, y actividades en establecimientos educativos y comunidades locales. Incluso se brindan talleres a empresas interesadas en promover un ambiente libre de violencia entre sus colaboradores. Estas acciones están diseñadas para sensibilizar a las personas sobre la importancia de prevenir situaciones de violencia dentro del hogar y la comunidad.
La Oficina de Violencia Familiar no solo ofrece apoyo en situaciones de crisis, sino que busca crear una red de conciencia social que minimice los riesgos y los daños dentro de la familia y la comunidad.
Es importante recordar que la violencia intrafamiliar no solo afecta a la pareja, sino a todos los miembros del núcleo familiar, incluidos hijos, padres y otras personas que puedan estar involucradas en el hogar. Por ello, la prevención es la clave para evitar que los ciclos de violencia continúen.
Este tipo de acciones son esenciales para crear un entorno familiar y social más saludable, donde el respeto, la comunicación y la comprensión sean la norma.